Un centro de actividades comunitarias en Chengdu instaló una máquina expendedora de café automática JK86 cerca de su zona de ocio. Abastecida con opciones como leche caliente, café latte clásico y café helado (adecuado para todas las edades), la máquina admite pagos móviles y mediante reconocimiento facial. Los residentes pueden obtener una bebida en 40 segundos mientras esperan clases o actividades. Los locales elogian su conveniencia, especialmente adultos mayores y padres con niños, llamándola un "lindo pequeño capricho en la vida diaria". La administración del centro afirma que ha sido muy bien recibida, ya que la máquina añade una comodidad práctica para los residentes.